Con el título “Compartiendo Nuestros Dones”, el Rvdmo. Rafael Morales Maldonado publicó su segunda carta pastoral como Obispo de la Diócesis de Puerto Rico. Esta publicación, firmada durante la celebración del 2do Congreso de Laicos el pasado mes de agosto, está destinada a ser discutida y analizada por los laicos de las misiones que componen la diócesis de la Iglesia Episcopal en Puerto Rico y otras diócesis que forman parte de la Comunión Anglicana.
En esta carta pastoral, el Obispo Morales aborda la importancia de los laicos en la vida de la iglesia y su papel fundamental en la misión cristiana. La carta subraya que los dones espirituales son herramientas divinas que capacitan a los laicos para servir a Dios y a la comunidad de manera efectiva.
La Carta Pastoral está dividida en varias secciones. La primera explica el significado de la palabra “laico”, que proviene del latín laicus y del griego laikos, refiriéndose a aquellos fieles que no son miembros del clero. También se destaca el papel esencial de los laicos en la misión de la iglesia, participando en la evangelización, la liturgia, la catequesis y el servicio social.
En las siguientes secciones, se abordan temas como los laicos en las Sagradas Escrituras, donde se mencionan ejemplos históricos de laicos que desempeñaron roles cruciales en la historia bíblica, como Justino Mártir y Orígenes. También se discute el papel de los laicos dentro de la Comunión Anglicana y la diversidad de ministerios en la iglesia, destacando que cada laico tiene un papel único que desempeñar.
El documento también subraya la importancia de los dones y carismas, que son regalos del Espíritu Santo que capacitan a los laicos para servir a la comunidad. Además, se enfatiza la vocación del laico como una llamada a la santidad, al servicio y el apostolado del laico, que implica la difusión activa del Evangelio.
Finalmente, la carta concluye con un llamado a todos los laicos a reflexionar sobre sus dones y a buscar maneras de compartirlos con los demás. Este llamado es una invitación a vivir de acuerdo con la voluntad de Dios y a contribuir al crecimiento espiritual de la comunidad.
Lea la carta “Compartiendo nuestros Dones” aquí: